Londres, 11 ago (EFE).- La organización Amnistía Internacional (AI) manifestó su preocupación por la violencia en Ecuador tras el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio y pidió a las autoridades salvaguardar los derechos humanos.
«Las víctimas de la actual oleada de violencia política merecen verdad, justicia y reparación» y las autoridades «deben tomar medidas» para investigar estos crímenes, añadió.
En su comunicado, la organización no gubernamental dice que Ecuador se ha enfrentado a una crisis de inseguridad, concentrada principalmente en las zonas costeras cercanas a las ciudades de Guayaquil y Esmeraldas, y vinculada a actividades de la delincuencia organizada.
El 3 de mayo, el presidente Guillermo Lasso emitió un decreto que permitía el despliegue de fuerzas armadas en todo el territorio nacional «para reprimir la amenaza terrorista» en el país, sin poner ningún límite temporal a esta orden.
El estado de excepción declarado en respuesta al asesinato de Villavicencio, con una duración de 60 días, es el último de una serie de decretos de excepción del presidente y suspende una serie de derechos, entre ellos el derecho a la libertad de reunión.
Además, el decreto amplía el mandato de la policía y de las fuerzas armadas, que les permite entrar en residencias y locales para hacer registros y confiscar bienes, y permite a las autoridades acceder a correspondencia.
El derecho a la vida, la prohibición de la tortura y los tratos crueles, inhumanos o degradantes, la exigencia de que tanto la responsabilidad penal como el castigo se limiten a disposiciones claras y precisas de la ley, son derechos relevantes en relación con el reciente despliegue de fuerzas armadas en todo el país, agrega. EFE