Todo comenzó en redes sociales cuando Messi y varios de sus compañeros de la selección de Argentina aparecían en un video celebrando su victoria frente a México en el Mundial de Qatar 2022. Cantaban unos cánticos tradicionales del fútbol sudamericano, sin alguna palabra ofensiva y con una demostración de orgullo por su patria.
Pero en el video, Messi, que siempre ha dado una cara sobria ante los conflictos, se había metido a la boca del lobo, tal vez por descuido, por ingenuidad o por torpeza. En los festejos había una camiseta del equipo de México, seguramente en algún intercambio con un futbolista rival, que estaba en el suelo. Y con una pequeña patadita al quitarse el botín, empuja los colores mexicanos, dejando una imagen dolorosa y molesta.
Los mexicanos expresaron su molestia con Messi. A la cabeza nada menos que el boxeador Saúl «Canelo» Álvarez. La acción del argentino representó para el pugilista mexicano una afrenta y deshonra.
«Que le pida a Dios que no me lo encuentre!!», amenaza el pugilista y continuó en otras publicaciones pidiendo respeto por los colores de la bandera mexicana.
Sin embargo, otros han defendido a Messi. El periodista mexicano David Faitelson encaró un tenso round con el pugilista. “¿Y desde cuándo la camiseta de la selección mexicana de fútbol se convirtió en la bandera de México? He ahí el problema. Confundir un simple juego, una pasión, en un asunto de patria, de dignidad y de identidad”, escribió.
Por el momento, en la concentración argentina hay calma y Messi no se ha pronunciado. Seguramente habrá reacciones y lo ideal sería en la conferencia de prensa previa a la última jornada de la fase de grupos. En cambio, en el entrenamiento del combinado azteca, hay silencio y mesura, tal vez para no avivar el fuego de lo que podría ser la peor actuación de México en la historia moderna de la Copa del Mundo y la culminación de la tan criticada y desastrosa era del seleccionador de México, Gerardo Tata Martino, quien ha sido tildado de traidor por su nacionalidad argentina.
elcairbe.com
